jueves, 14 de abril de 2016

Después del temporal

Es un día gris,templado pero no húmedo. Me despierto temprano a desayunar y a escribir. Ayer,cuando la lluvia se detuvo, pude limpiar mi cocina y mi piso y se sintió tan bien lograr hacer tareas tan sencillas... que pensé que hoy sería un día mejor, seco, sin lluvia, sin dolor. Pero se acerca el mediodía y mis tenazas de carne y huesos me estrujan y estrujan probando mi resistencia mental y espiritual. Las ganas de gritar son inmensas,como también las de encogerme bajo las frazadas en posición fetal. Pero no hago ni una ni otra. En cambio me rodeo de libros, de cuadernos, de mi tableta, de mis herramientas para escribir y sacarlo afuera y resistir un día más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario